A la luz de los objetivos y propósitos que Dios ha puesto en nuestros corazones hasta ahora, debemos trabajar entonces para alcanzar las siguientes metas:
1. Nuestra Meta es Guiar a cada persona a poner toda su fe y confianza en el Señor Jesucristo, a amarlo con todo su corazón, alma, mente y fuerzas (Romanos 10:9).
2. Nuestra Meta es Desarrollar el carácter de Cristo en cada persona, en cada matrimonio, y en cada familia, de tal manera que sean un estándar y un ejemplo digno de imitar por otros cristianos (Efesios 4:12-16).
3. Nuestra Meta es Enseñar a cada hombre como suplir las necesidades de su esposa y deleitarse en ello, con el mismo amor con que Jesucristo amo y ama a la Iglesia entregándose en sacrifico perfecto por ella (Efesios 5:25-33).
4. Nuestra Meta es Enseñar a cada esposa como amar a su marido y niños, como ser discreta y de mente pura, como administrar su casa, y como adaptarse a su esposo, de tal manera que las personas que la conozcan reciban el poderoso mensaje del evangelio (I Pedro 3:1-6).
5. Nuestra Meta es Volver el corazón de cada padre hacia sus hijos e hijas, de tal manera que les enseñen los principios bíblicos para que ellos alcancen éxito en la vida como personas, cónyuges, y padres ( Malaquías 4:6). De igual manera, proveer tutoría y educación en donde sea verdaderamente necesario a niños y jóvenes en los Principios Bíblicos (Deuteronomio 6:6-8; Salmo 78:5-8).
6. Nuestra Meta es Demostrar nuestro amor a Dios y nuestra lealtad los unos a los otros dando siempre un reporte bueno el uno al otro, a menos que sigamos Mateo 18 en espíritu de restauración en lugar de acusar o juzgar ( Gálatas 6:1).
7. Nuestra Meta es Explicar y aplicar los principios de Dios en cuanto a las finanzas en la iglesia y en cada familia, de tal manera que Dios provea una dirección especifica y demuestre su Poder Sobrenatural (I Crónicas 29:11-17).
8. Nuestra Meta es Motivar a las mujeres a un vida de santidad y fervor, proveyendo ministerios que las ayuden financieramente cuando sean ancianas, se queden sin esposo, o no tengan familiares que las ayuden (Hechos 2).
9. Nuestra Meta es Entrenar a los creyentes a edificarse y compartir unos a otros lo que Dios ha hecho en sus vidas, y así fortalecer a la iglesia ( Efesios 5:19), ayudando a cada cristiano a descubrir sus dones espirituales y ayudarlos a que los ejerciten expresando el amor de Dios a los miembros del cuerpo de Cristo (I Corintios 12; Romanos 12 y Efesios 4).
10. Nuestra meta es Extender el mensaje del Reinolevantando congregaciones en diferentes ciudades y naciones supervisadas localmente con un equipo de ancianos y hombres fieles y extra localmente con un equipo apostólico (Hechos 13).